MIRADOR OESTE

MIRADOR OESTE

Aquí, es la puesta de sol lo que no podemos perdernos. Esta vez, tumbados en una cama de día de cuero blanco de los años 80 o en la cama de hierro de principios del XX… ambas con mucha historia detrás y rodeadas de telas preciosas, como las cortinas de Pied de Poule (al estilo Chanel), una colcha filipina de seda roja y cojines para dejarnos llevar por las vistas.