Casa Caranco es un paraíso para vivirlo, para disfrutarlo y para salir inspirados en cada visita que se haga.

Situada en Cotillo, en el Valle de Anievas, está rodeada de todo lo que se espera cuando nos queremos perder sin alejarnos del mundo… el río Casares que linda con la huerta, los montes de El Portillón que saludan a cuatro de los cuartos, pueblos con mucho encanto y el románico más puro son bellezas que acompañan a Casa Caranco.

A escasos kilómetros del centro geográfico de Cantabria (a 40 min. en coche de Santander y 400 km de Madrid), La casa se construye a mediados del S. XIX por una familia de la zona que vuelve de Cuba. Cien años después, a mediados del S. XX, con los cambios políticos, se convierte en la panadería del pueblo (en el salón, aún se conserva parte de los ladrillos que formaban el horno) y en las décadas posteriores, varias familias han seguido pasando por la casa hasta que hace unos años, empezó la transformación que ha convertido esta preciosa construcción y su huerta definitivamente en Casa Caranco.

Casa Caranco, ofrece la posibilidad de trasladarse al S. XIX, suelos de roble y de nogal, ventanas y puertas originales, muros y tejas recuperados y un entorno donde, esté soleado o gris, los verdes son más verdes y los campanos de las vacas hipnotizan. Casa Caranco ofrece también todas las comodidades del S. XXI, para nosotros, la simbiosis es perfecta.